Éstos días de confinamiento en los que todos practicamos el #YoMeQuedoEnCasa están sacando a relucir todas nuestras dotes culinarias (incluso el que no había entrado a la cocina más que a por un vaso de agua, se aventura a cocinar…). Por eso y porque seguramente habrá recetas que no nos queden como esperábamos. AQUÍ VAN UNA SERIE DE CONSEJOS PARA «ARREGLARLO»:
* ¿LA PASTA TE HA QUEDADO DEMASIADO PASADA? ¡Tranquil@! Puedes devolverle el punto al dente lavándola en el escurridor con agua fría y removiéndola con cuidado de que no se rompa. Luego, pásala por una sartén con aceite y ..¡Todo solucionado!
* ¿EL GUISO TE HA QUEDADO DEMASIADO SABROSO? No pienses que has perdido tu tiempo en la cocina… Lo que debes hacer es volver a hervir el guiso con un trozo de patata cruda dentro durante un rato. Y la patata absorberá el exceso de sal.
* ¿SE TE HA IDO LA MANO CON EL PICANTE? Aver, tienes varias opciones para solucionarlo. Algunos de los ingredientes que ayudan a enmascarar el sabor del picante son: el yogur de soja, la leche de coco y la mantequilla de frutos secos, como las pasas, cuyo sabor dulce ayuda a suavizar el picante.
* ¿LA SALSA QUE HAS HECHO TIENE DEMASIADOS GRUMOS? Lo primero…¡ No desesperes! Elaborar salsas no es fácil, y sobretodo si estamos hablando de una bechamel. Si te gusta que las salsas queden con textura muy fina, deja que se enfríe, añade algo de líquido, bate y calienta en un cazo a fuego lento. También puedes utilizar éste truco para que las cremas de verduras queden sin grumos y darle sabor con un quesito.
Seguro que te hemos «solucionado» algún que otro «desastre culinario»…¿Verdad? ;P